Poco podemos decir de la relación que existe entre ejercicio físico y salud que no se haya dicho ya. Está más que demostrado que practicar deporte de manera regular es uno de los aspectos más decisivos para gozar de una buena salud y aumentar la esperanza de vida.
Además, aquí podemos hablar de la pescadilla que se muerde la cola: hoy en día, vivimos más años y practicar ejercicio nos permitirá disfrutarlos en mejores condiciones físicas y mentales, de la misma forma que, precisamente, la práctica de ejercicio nos ayudará a ser más longevos. Ambas afirmaciones nos conducen al tema del que hoy queremos hablarte en este post: la importancia de practicar ejercicio físico en la tercera edad.
Acondicionamiento físico para personas mayores.
Cuando hablamos de ejercicio físico en personas mayores se suele hablar de acondicionamiento físico. ¿Se trata de un tipo de entrenamiento especial para mayores? No exactamente. Hablamos de un conjunto de ejercicios físicos adaptados a esa edad y orientados a acondicionar su cuerpo en términos generales para mantenerlo en buena forma.
Podemos decir que el acondicionamiento físico es el entrenamiento de todas las capacidades del cuerpo humano tales como fuerza, resistencia, velocidad, flexibilidad o coordinación. Depende del objetivo que se persiga, ese acondicionamiento irá más enfocado a unas capacidades u otras. En el caso de las personas mayores de 65 años, hablamos siempre de acondicionamiento físico porque se trata de un entrenamiento genérico que pretende conseguir un mantenimiento de la forma física general, prestando especial atención a la mejora de la fuerza, la capacidad cardiorrespiratoria, la coordinación y el equilibrio.
En definitiva, se trata de conseguir una buena forma física general y una mejor conservación del cuerpo, pero también de ralentizar el envejecimiento gracias a los beneficios físicos y mentales que aporta el deporte.
Beneficios de practicar ejercicio en la tercera edad.
Las personas mayores pueden obtener muchos y diversos beneficios de la realización de ejercicio físico de manera rutinaria como estos que detallamos:
1.-Mejora el sistema cardiovascular. Disminuye el riesgo cardiovascular al potenciar el corazón y mejorar la circulación en los vasos sanguíneos.
2.- Aumenta la fuerza muscular. El hecho de incluir ejercicios de fuerza previene la pérdida de músculo asociada al envejecimiento.
3.- Mejora la densidad ósea. Previene la pérdida de hueso disminuyendo el riesgo de fracturas y fisuras. Especial mención en el caso de las mujeres y la osteoporosis.
4.- Permite una mejor movilidad. La actividad física contribuye a mantener la autonomía en la vida cotidiana y a que las personas mayores no se queden entumecidas y anquilosadas.
5.- Combate el sobrepeso. Otro factor de riesgo para las personas que tienen problemas de azúcar, hipertensión… y que el ejercicio físico regular ayuda a combatir.
6.- Disminuye las consecuencias de muchas enfermedades crónicas. Especialmente el dolor proveniente de músculos y articulaciones, que se reduce notablemente.
7.- Mejora el estado anímico y mental. Practicar ejercicio se nota en la memoria, la coordinación, los reflejos, el sueño y el humor. Para muchas personas mayores con cuadros de ansiedad, estrés o depresión, practicar ejercicio es una auténtica tabla de salvación.
¿Te gustaría que tus padres o familiares mayores comenzaran a practicar ejercicio pero no los ves acudiendo a un centro deportivo? Pues si nunca han hecho ejercicio, siempre pueden comenzar con un entrenamiento personal a domicilio. Se sentirán más cómodos en su casa, sin abandonar su hábitat y no les dará nada de pereza. A partir de aquí, ¿quién sabe?
Apuesta por un entrenador personal en Madrid recomendado para tus familiares mayores y pronto notarás todos los beneficios de practicar ejercicio en la tercera edad.